Desde hace bastante me vengo encontrando cada cierto tiempo con la historia del experimento de los monos condicionados con chorros de agua fría, una parábola viral que circula a diestro y siniestro por Internet en páginas, correos electrónicos, redes sociales, blogs, foros, etc. Tanto el texto ‒traducción directa del inglés‒ como las imágenes que ilustran la historia se suelen repetir casi idénticos en todas partes. Existen algunas versiones, evidentemente posteriores, con diferencias muy poco significativas, como puede ser adaptar la parábola al formato vídeo.
La versión que pongo de la historia a continuación proviene de Microsiervos: «Un grupo de científicos encerró a cinco monos en una jaula, en cuyo centro colocaron una escalera y, sobre ella, un montón de plátanos. Cuando uno de los monos subía la escalera para agarrar los plátanos los científicos lanzaban un chorro de agua fría sobre los que se quedaban en el suelo. Pasado algún tiempo, los monos aprendieron la relación entre la escalera y el agua, de modo que cuando un mono iba a subir la escalera, los otros lo molían a palos. Después de haberse repetido varias veces la experiencia, ningún mono osaba subir la escalera, a pesar de la tentación de los plátanos. Entonces, los científicos sustituyeron a uno de los monos por otro nuevo. Lo primero que hizo el mono novato nada más ver los plátanos fue subir la escalera. Los otros, rápidamente, le bajaron y le pegaron antes de que saliera el agua fría sobre ellos. Después de algunas palizas, el nuevo integrante del grupo nunca más subió por la escalera. Un segundo mono fue sustituido, y ocurrió lo mismo con el que entró en su lugar. El primer sustituido participó con especial entusiasmo en la paliza al nuevo. Un tercero fue cambiado, y se repitió el suceso. El cuarto, y finalmente el quinto de los monos originales fueron sustituidos también por otros nuevos. Los científicos se quedaron con un grupo de cinco monos que, a pesar de no haber recibido nunca una ducha de agua fría, continuaban golpeando a aquél que intentaba llegar hasta los plátanos. Si fuera posible preguntar a alguno de ellos por qué pegaban con tanto ímpetu al que subía a por los plátanos, con certeza ésta sería la respuesta: No lo sé. Aquí, las cosas siempre se han hecho así».
No se puede negar que la historia tiene su gancho aunque hay un par de cosas que no me llegan a encajar del todo. Frecuentemente se le suele poner al final un par de añadidos bastante sospechosos. Una moralina simplona que dice «No pierdas la oportunidad de contar esta historia a tus amigos, para que, de una o de otra manera, se pregunten por qué están golpeando y por qué estamos haciendo las cosas de una manera, si a lo mejor las podemos hacer de otra» y una cita atribuida a Albert Einstein: «Como dijo Albert Einstein, ¡Triste época la nuestra! Es más fácil desintegrar un átomo que un prejuicio». Además, la parábola suele aparecer más con un enfoque de libro de autoayuda o para reforzar el éxito empresarial que como un estudio serio del comportamiento animal.
Adivina qué ocurre si tratas de averiguar quiénes fueron esos científicos que realizaron el experimento. Efectivamente: no se encuentra nada. Cualquier página no hace sino repetir la misma historia con idénticas palabras. Como al final del relato se le pone una cita de Einstein he visto alguna página en la que se ha interpretado eso erróneamente y se le ha atribuido el experimento al físico alemán. No me imagino al pobre Einstein lanzando chorros de agua fría a los monos.
Si se sigue investigando un poco más se empieza a descubrir, por lo menos superficialmente, el origen de la historia. Michael Michalko, consultor creativo del mundo empresarial, contó la historia en su blog y un primatólogo le dejó un comentario diciéndole que el experimento le parecía dudoso y preguntándole en qué estudios se basaba. Michalko le contestó diciéndole que la historia se había originado en un estudio que un tal Stephenson realizó en 1967 titulado Cultural acquisition of a specific learned response among rhesus monkeys. Aunque parece que el experimento de Stephenson fue en realidad bastante distinto a la historia que se acabó contando al final. En relación con Stephenson, el psicólogo Bennett Jeff Galef puso en duda que en la década de los 60 nadie hubiera podido reproducir un experimento tan complejo como el que se describe en la historia. Según Galef la historia parece más bien una mezcla del experimento de Stephenson con el trabajo de Wolfgang Köhler con los chimpancés, el de Jacob y Cambell sobre la arbitrariedad de las normas a través de generaciones en seres humanos y los estudios de Susan Mineka ‒que revisó el trabajo de Stephenson‒.
¿Por qué no simplemente quedarse con lo bonito del mensaje y seguir insistiendo en saber si el experimento fue real o no? Primero, porque si el experimento nunca se hizo la historia no puede ser completamente fiable ‒y de hecho Mineka demuestra que no lo es‒. Segundo, por la manera en la que se ha difundido y se sigue difundiendo. ¿De verdad hace falta presentarlo como un experimento científico y no como lo que realmente es, un mito? Cuando uno lee una página o un blog en Internet espera, quizá demasiado inocentemente, que la información sea algo más que un copia y pega y que esté mínimamente contrastada.
Y he aquí el punto en que la parábola se convierte en paradoja. Los que reproducen la historia de los monos sin contrastar ni las fuentes ni su veracidad están cayendo en el mismo error en que caen los monos del relato. No es que nadie vaya a echarles un chorro de agua fría, pero sí repiten una y otra vez, por inercia y sin cuestionarse, un comportamiento determinado, un paradigma que podría ser erróneo. Bien podrían decir aquello de «No lo sé. Aquí, las cosas siempre se han hecho así». Por favor, hagamos que el sacrificio de esos cinco pobres monos no haya sido inútil e intentemos ofrecer informaciones veraces y contrastadas.
Nunca había dado por cierta esta historia, pero siempre había pensado lo que indicas en el último párrafo; que es una paradoja.
El mensaje estilo autoayuda está claro: Los prejuicios son malos, hay que cuestionar lo establecido. Pero no es menos cierto que cuando las cosas se hacen de una determinada manera por algo será.
Pero el empaquetamiento en forma de historia elimina la capacidad de argumento y se transmite como lo que quiere criticar, una máxima que no se cuestiona.
Que bien que hayas captado lo que quería decir, no sabía si lo había dejado muy claro y no sabía si esto podía interesarle a alguien o era una rabieta mía. Sé que Internet está lleno de este tipo de mensajes. Me parecía bonito, pero claro, se disfraza con una apariencia pseudocientífica que molesta mucho. Un saludo.
No sé si lo he captado porque ya pensaba lo mismo, pero en cualquier caso ha sido una alegría encontrarlo tan bien explicado.
gracias por tu aporte. me resultó muy util para la busqueda de fuentes sobre los videitos de los monos. Hasta el momento solo habia encontrado algo que andaba apenas cerca, un experimento llamado «Efecto del centésimo mono»
Me alegra que te haya parecido útil. Era uno de esos artículos que antes de publicarlo pensaba si realmente podía interesarle a alguien.
Todos los que lo leen o reproducen al cuento no lo utilizan desde su veracidad cientifica, lejos de eso…mas bien porel mensaje que intenta dejar. El unico que parece creer en que eso fue veridico fuiste vos.
Hola Alejandro. Enhorabuena por tu blog y por este post en cuestión.
quería hacerte un par de consultas:
En este blog: http://pablotovar.com/?p=2100 cita esta fuente: Stephenson, G. R. (1967). Cultural acquisition of a specific learned response among rhesus monkeys. In: Starek, D., Schneider, R., and Kuhn, H. J. (eds.), Progress in Primatology, Stuttgart: Fischer, pp. 279-288.
Yo pienso más como tú, pero ahora no sé a quien hacer caso, si a ese estudio que citan a Stephenson o ti, que tienes que reconocer que citas pero no muestras, simplemente dices que fue distinto, y ahora mi petición: Puedes poner de que trataba ese experimento distino?
muchas gracias.
Muchas gracias. Ya lo he encontrado
http://www.jotdown.es/2013/05/cristian-campos-el-mono-eres-tu/
Bueno, me alegro que lo hayas podido encontrar. No quería extenderme demasiado, pero quizá había cosas que tendría que haber explicado con más detalle. No conocía ese artículo que mencionas. Sobre este tema no hay mucha información en Internet y todo lo que merece la pena está en inglés, por eso me ha sorprendido descubrir ese artículo en español. Espero que hayas podido llegar a una conclusión.
Muy buen artículo, sí señor.
Sabes lo que me ha pasado? Pues que esta tarde en clase, en la universidad, en una asignatura de creación de empresa internacional un profesor nos ha explicado esta historia de los monos (en este caso eran 20, 5 ya son pocos) y ha caído muy bien haciendo muchas gracia a todos los presentes, motivando mucho a los alumnos.
Como uno ya tiene más de 40 años, empieza a peinar canas y encima es curioso de naturaleza, pues con una herramienta como internet, pues la ecuación estaba clara.
Después de una búsqueda en que me han salido, literalmente, cientos de webs explicando la misma historia, he caído en esta y luego me he dado un par de vueltas más.
Que curioso e interesante es esta historia. Como se ha dado la vuelta, como la frasecita «no seas mono», como queriendo decir «piensa por ti mismo» ha ido a dar la vuelta, e incluso un profesor de universidad ha caído en la paradoja.
Hecho a posta no sale mejor, seguro.
Felicidades por el artículo.
Quique
Hola Quique, me alegro que el artículo te haya resultado útil. La verdad es que buscando información sobre esta historia en internet lo primero que sorprende es la cantidad de páginas que dan por hecho su veracidad y lo difícil que es encontrar páginas que la cuestionen o, más todavía, que la destapen. Es una historia que se suele utilizar frecuentemente para motivar, y no seré yo el que diga que no tiene un cierto gancho. De hecho, cuando se cuenta es difícil no sentirse en cierto modo cautivado. Sin embargo, no tiene ninguna base científica seria y se ha ido corriendo del boca a boca sin llegar a contrastarse de verdad. Un saludo.
Muy bueno tu escrito criticando que NO HAY EXPERIMENTO que respalde lo que se propone. Creo que en nuestros tiempos es común usar la expresión «está científicamente comprobado que…» como equivalente a «lo que voy a decir es incuestionable porque ya lo hicieron los científicos así que nada de críticas, eh». Nada más opuesto al espíritu científico. La práctica científica consiste en el CUESTIONAMIENTO ABIERTO Y SISTEMÁTICO de lo que se proponga como una explicación. Y para ello son básicas las referencias, que en este caso no existen.
Alejandro Gamero, te cuento que no fueron 5 pobres monos, fueron 10.
saludos
Alejandro me gusta mucho tu análisis pero dejame q te diga q el fondo de la historia ez lo q vale el invento. Si reemplazas a los monos por personas trabajando vetas con que frecuencia se convalida el experimento en el trabajo cotidiano.
Gracias por el placer de conocer otra perspectiva de las cosas. Me hiciste el día.
Excelente explicación. Gracias por la difusión. Ya me imaginaba yo que no era cierta…
Hola, Si leéis, pedagogía para docentes universitarios de Raúl Verdú, allí se explican los 8 niveles de aprendizaje existentes. Desde el más bajo, reflejo condicionado hasta el más alto pensamiento científico. El que corresponde a los monos se denomina aprendizaje por repetición e imitación, claro que los humanos usan este nivel de aprendizaje, y allí se explica cuando y donde se experimentó y quienes lo hicieron. Finalmente, un mono no piensa por tanto sólo le queda imitar o repetir. Saludos.
Hoy en día aceptamos cualquier tipo de información porque nos parece «bonita» e incluso juzgamos de una manera inquisitiva porque aceptamos como correcta cierta información, creo que debemos de optar por tener una actitud que cuestione todo para acercarnos lo más posible a la verdad.
Saludos.
Gracias por el artículo, me has jodido una buena historia pero me has abierto los ojos jeje. Algo igual pasó con las 10 estrategias de manipulación mediática de Chomsy, y lo publiqué en mi blog… aquí (perdona el spam):
http://nosinmibici.com/2010/11/15/noam-chomsky-y-las-10-estrategias-de-manipulacion-mediatica-la-paradoja-de-la-desinformacion-en-internet/
EN fin, internet es un enorme ventilador de de mitos, leyendas urbanas, desinformación y mediocridad. Parece que, en lugar de se la herramienta que universalice y democratice el conocimiento, será todo lo contrario. Creo que no lo restringirán o prohibirán como piensan muchos, al contrario, los gobiernos estarán encantados de ahorrarse tanto trabajo en desinformar gracias a la inestimable colaboración de millones de ingenuos «monos». Un saludo.
«Nunca te fies de todo lo que esté en internet» -Kant.
Ahora fuera bromas, como el comentario anterior dice, me has jodido una buena historia que en parte, aun y cuando sospechaba, como tú mismo dices, por falta de una fuente, me parecía una curiosidad divertida y que ahora ya no podré reproducir tan alegremente.
Por otra parte yo nunca la vi con esa «cita» de Einstein.
Si es que, con lo feliz que estaba en mi ignorancia… como un monito más.
Siguiendo al comentario anterior, es curioso que una herramienta que nos ofrezca toda la información imaginable sea contraproducente. Últimamente en internet el problema es, no conseguir información, sino no perderse en un mar de irrelevancias; quién lo diría.
Buenas Tardes!!
Me gusto el articulo, yo siempre he tenido dudas de la historia, aunque para ser sincero tampoco confio mucho en tus palabras. Jjejejeje. Evidencias lo obvio, y eso le quita valor a tu punto de vista; es algo asi como decir, las estrellas salen de noche; pero decir que es mentira porque a veces hay nubes y no se ven, a veces desde la perspectiva de la tierra se ven muy pocas. Igual las estrellas siguen ahi; igual el comportamiento de los monos continua ahi. La historia de los monos, la escuche hace unos 15 o 20 años de un Doctor en Ciencias del Comportamiento; obviamente en ese tiempo el internet estaba en Pañales asi que dudo que su fuente de consulta haya sido la red de redes. En su explicacion mucho mas detallada, explicaba que en efecto como se dice en un comentario previo, no fueron 5 si no 20, y que realmente no todos los monos nuevos reaccionaban igual al principio, y que incluso los monos nuevos, con la entrada de un nuevo miembro que no habia sido expuesto al chorro de agua, y que intentaba alcanzar los platanos (y frutas), intentaban unirse y luchar con los otros monos, intentando alcanzar las frutas ubicadas en la parte alta.
Considero que el mito se construyo a partir de una realidad que daba lugar a especulaciones por parte de los expertos de la minuciosidad, pero el fondo terminaba siendo el mismo; asi que se condiero mas util, reducir el numero de monos y centrar la historia en la parabola y no en los monos heridos y peleados
Por otro lado tienes absolutamente toda la razon,, citar como cierto algo de lo que no se esta suficientemente bien documentado es un irrespeto con el lector asi como una irresponsabilidad desde cualquier punto de vista. Sin embargo quitarle merito a la parabola del experimento fallido por este error cometido por las mayorias es igualmente arbitrario y sobre todo innecesario.
Freddy, te agradezco la cordialidad de tu participación, pero lamento decirte que algunos de tus razonamientos difícilmente se sostienen. No importa si un Doctor en Ciencias del Comportamiento te contara esta historia antes de que existiera Internet, lo único que para mí tendría validez es que me aclararas la fuente original del experimento. ¿En qué fuente se basó él o de qué fuente estamos hablando? Cuando he tratado de investigar lo único que he encontrado es humo. Me hubiera gustado escribir que el experimento era cierto, pero no pude hacerlo porque no hay nada que demuestre que lo sea. Si tienes otra información dámela y no tendré ningún problema en rectificar el artículo.
Yo no le quito mérito a la parábola. De hecho, como parábola me parece incluso bonita. Pero hay que darle la categoría que le corresponde. Despojarle de ese halo de veracidad y de cientificidad y dejarlo como una bonita metáfora sobre el comportamiento humano. Esto no creo que sea para nada arbitrario. Es lo justo.
El asunto es que asi le pasa a los animales que viven en corrales electrificados, la primera generacion «aprende» a no tocar o acercarse a la malla, luego se lo enseñan a sus crias, la historia tiene fundamento cientifico a aunque no exista ese experimento como tal, hay muchos otros similares que lo respaldan.
[…] clases. En serio, luchamos por la justicia e igualdad. De ser necesario usaré la historia de los cinco monos condicionados que irónicamente nos ayudan a imponer nuestro paradigma… pero seguimos luchando por la […]
Hola, no caigo en el 2do Paradigma, nunca lo vi como una historia real, mas si como una pequeña historia o cuento que te hacer entender de forma simple el Paradigma….. Como le echen de su cosecha la gente que lo comparta, es otra cosa.
Yo creo que no tiene sentido cuestionar si la historia es real o no. Lo importante es el mensaje que deja. Acaso alguien se pone a pensar si el rey leon existió? Obvio que no! Porque ese no es el punto de la historia. La idea es utilizar este cuento para enseñar!
[…] antes así. El famoso experimento de los monos y los plátanos lo expresa muy bien. Experimento que alguno ha puesto en cuestión, sin afectar al paradigma al que […]
Buena tu reflexión, aunque me tumbó el artículo que estoy escribiendo. El experimento me parecía demasiado perfecto para explicar el comportamiento humano ante el cambio o ante la innovación o la rebeldía. Es decir, veía un comportamiento humano antes que un comportamiento animal. Además, pensaba que de ser cierta la experiencia, había que cuestionar conclusiones anteriores sobre la extinción de conductas por ausencia de reforzamiento que, en el caso de los monos nuevos, el reforzamiento negativo eran los monos iniciales; pero, en el caso de éstos, era la ducha de agua fría. En ausencia de la ducha fría la conducta se debilitaría hasta desaparecer o surgiría otro reforzamiento para mantener la conducta, por ejemplo, que resultara placentero golpear a los recién llegados.
Al igual que tú, intenté, inútilmente, leer el informe del experimento. Ahora consigo tu blog y consigo casi con las mismas palabras lo que venía escribiendo sobre el asunto. Sobre todo lo relativo a la repetición sin evaluación crítica de la verdad y las consecuencias teóricas del experimento como modelo de lo que el experimento revela.
Bien, desisto de escribir el artículo, no por afán de originalidad, sino para ahórrarle a la gente el tiempo que supone leer lo que acertadamente ya tu escribisteis.
Gracias.
Felicidades has sido parte del mismo experimento , hasta que tu ya como ser pensante más evolucionado del mono , te preguntaste si el estudio era real , porque decían lo que decían etc,etc..
esto evidencia que el experimento es real y fuiste parte de el.
[…] Tesla” se nutre de ignorancia y de paradojas a partes iguales, especialmente la “paradoja de los monos y los plátanos“, pues por una parte la ignorancia lleva a las personas a aceptar como válido y veraz lo que […]
[…] Rompiendo el paradigma del experimento de los monos […]
Hola Alejandro,
Muy bueno el post. Como otras de las personas que comentan, he llegado a él intentando comprobar la veracidad del experimento. Había visto ya que había páginas que lo atribuían a Stephenson; pero al buscar y leer el artículo citado (acquisition of learned responsen among rhesus monkeys), estaba claro que se trataba de otro experimento. El experimento que hizo Stephenson se puede leer aquí: https://drive.google.com/file/d/0Bznu8UkHCc-CTFRQWTlVeWtSRDA/view
La cosa es que entre los estudios reales que citas como inspiración de este fake posterior, está el de Jacob y Cambell sobre la arbitrariedad de las normas a través de generaciones en seres humanos. No lo conozco, y me ha interesado el título, pero no consigo encontrar nada. ¿Sabes el título original del estudio o tienes alguna información más que me ayude a encontrar el artículo original?
Respecto a tus dudas sobre si el post podía resultar útil o era una pataleta tuya… a mí alertar del peligro de los fakes siempre me parece útil, y de todas formas también me parece muy justificado agarrarse una pataleta ante la avalancha de ellos que sufrimos.
[…] organizacional. Antes de entrar a describir esta temible zona, voy a hacer mención a una historia publicada por primera vez por Michael Michalko, que basándose en varios experimentos psicológicos realizados en animales, originó una fábula […]
[…] Fuente […]
Alguien ha visto por sí mismo que la Tierra sea redonda? Alguien sabe de verdad si la humanidad ha llegado a la Luna? Alguien ha estado delante de Dios para asegurar su existencia? Alguien tiene alguna referencia de que este experimento se haya realizado nunca?
[…] [2] Tomado de: https://lapiedradesisifo.com/2013/08/08/rompiendo-el-paradigma-del-experimento-de-los-monos/ […]