La serie «Retrato» elaborada por Enrico Milkyeyes, Donato Sansone y Enrico Ascoli es algo así como un Francis Bacon en movimiento. Una versión 2.0 del pintor irlandés. Y, desde luego, partiendo del mismo espíritu surrealista, onírico y grotesco, sus creadores consiguen dar un paso más. Imagina estar contemplando uno de sus monstruosos seres y que de pronto te guiñe un ojo o te siga con la mirada.
Cada retrato tiene una duración de entre cuatro y cinco segundos y se acompañan de una pista de audio que ayuda a culminar ese ambiente de pesadilla que buscaban. La idea es seguir completando el vídeo hasta que alcance unos tres minutos. Imagino que si dieciséis segundos ya son inquietantes tres minutos deben de ser como un suplicio.
Para hacer los retratos utilizan imágenes de personas reales, sometidas a distintos procesos de edición de vídeo y a diversas herramientas y técnicas de composición.
No hay comentarios