Obsesión, cuyo título original es The Boy Next Door, es la última película de Jennifer Lopez, estrenada en Estados Unidos el mes pasado. En ella la actriz interpreta a una madre recién separada que comienza un romance con un nuevo vecino, un adolescente que además es su alumno. En una de las escenas de la película el chico, interpretado por Ryan Guzman, regala al personaje de Lopez una supuesta primera edición de La Iliada. Ante este impresionante obsequio una sorprendida Lopez exclama: «Oh, Dios mío, ¿se trata de una primera edición? No puedo aceptar esto, debe de haber costado una fortuna». A lo que su joven admirador responde, quitándole importancia, que lo ha comprado por un dólar en un mercadillo.
Pues bien, muchas de las personas que han visto la película se han sentido tan fascinados como Jennifer Lopez y se han lanzado a la búsqueda del mismo libro que aparece en la película ‒una edición con las tapas duras de color amarillo y azul oscuro‒, supuestamente la primera edición del poema homérico La Iliada. Como consecuencia, «La Iliada, primera edición» se ha convertido en la búsqueda más solicitada en el portal de libros de segunda mano y primeras ediciones Iberlibro, muy por delante de la novela que venía ocupando ese lugar desde hace algún tiempo, Matar un ruiseñor. Ahora bien, según Richard Davies, portavoz de Iberlibro, el libro que aparece en la película no coincide con ninguna de las ediciones de La Iliada que figuran en el catálogo del portal. Es más, dice Davies, podría ocurrir incluso que ese libro no existiera, aunque, según parece, se trataría de una edición de Belford, Clarke & Co impresa en Chicago en la década de 1880.
De hecho, teniendo en cuenta que La Iliada fue escrito alrededor del año 700 a.C., mucho antes de la invención de la imprenta en 1440 y mucho antes de que existiera el idioma inglés, pensar que el libro que aparece en la película sea una verdadera primera edición de la obra es cuanto menos ridículo. Para encontrar la copia más antigua del texto completo habría que retroceder a finales del siglo X, pero no antes y, por supuesto, está en griego. Así que, como no podía ser de otra forma, la escena ha sido ampliamente parodiada por numerosos medios. En una parodia de WTFark, por ejemplo, se dice: «Hay algunas cosas que el dinero no puede comprar y, al parecer, la cultura general no es una de ellas».
Desde el estreno de la película la edición más cara de La Iliada vendida en Iberlibro ha sido una copia de una traducción de Alexander Pope de 1715, por 2.500 libras. Muy lejos, todavía, de la que es La Iliada más cara que hay en Iberlibro, una primera edición de una traducción ilustrada, también de Pope, con un precio de más de 21.000 libras. Y eso que todavía no estamos hablando de una primera edición original.
Davies trata de buscarle un sentido a la absurda escena de la película de Lopez. Desde el siglo XVI ha habido numerosas impresiones de La Iliada y cada una de ellas podría catalogarse de primera edición. En este contexto sí se podría hablar de una primera edición con propiedad, pero para muchos la escena de la película da a entender que se trata de la primera edición original.
Desde que leí «Ilión», de Dan Simmons, la Ilíada (texto en el que se basa parcialmente) es un mero cuentecito corto para niños, un texto sin prácticamente nada que ofrecer. Sin embargo, recuerdo haberlo devorado con ansia en lugar del Quijote (libro que me obligaban a leer en Bachillerato).
Lo que hace la perspectiva.
Yo siempre he sido más de La Eneida de Virgilio desde que una profesora me enseñó en la carrera a amar este libro. Pero tampoco me atrevería a decir que La Ilíada es un cuentecito corto para niños sin nada que ofrecer.
Entonces léete Ilión =)
«Vas a flipar» es la expresión. Lo aconsejaré hasta dos días después de que me muera. O más.
Yo encontré una edición de la Ilíada polvorienta, con las hojas medio carcomidas, cuando era una niña, entre los libros viejos de mis tíos. Pero estaba en castellano (ya me habría gustado que estuviera en griego y que se tratara de una primera edición, e incluso una copia posterior griega de la misma). El que yo encontré se podía leer, las hojas estaban agujereadas sólo en algunas zonas y eran muy pequeños los orificios como para impedir la lectura. Con el tiempo adquirí el de Gredos, pero recuerdo perfectamente ese libro forrado en tela morada, con el lomo gris. Tras su lectura, no lo volví a ver (alguien lo tiraría al verlo estropeado). Siempre me han gustado esos libros viejos y he intentado restaurar en lo posible muchos. De hecho, casi todos los que poseo están en buen estado, bien conservados. No puedo creer que la gente pensara que podía ser en serio una primera edición… ¡Lo que hace la ignorancia! (y el fetichismo) Gracias. Un saludo.
Yo tengo unos cuantos libros de esos, más por valor sentimental que porque valgan algo de verdad. Desde hace algún tiempo me aficioné a coleccionar libros antiguos y primeras ediciones y poco a poco he ido juntando unos cuantos que merecen la pena. Quizá no valgan demasiado, pero yo estoy muy orgulloso de tenerlos. Una cosa es confundir una primera edición del siglo XX (cosa que incluso me ha pasado a mí y he acabado pagando el pato porque me han dado gato por liebre) y otra cosa es pensar que un libro anterior a la imprenta pueda tener la forma de libro editado.
«Lie quiet Divus. I mean, that is Andreas Divus,
In officina Wecheli, 1538, out of Homer.» — Pound, Canto I