Las relaciones entre personajes en las tragedias de Shakespeare

Las relaciones entre personajes en las tragedias de Shakespeare

   Shakespeare ha sabido captar como ningún otro escritor la enorme complejidad de la psicología humana, a diferencia, por ejemplo, de autores como Lope de Vega, cuyas comedias se suelen basar en la repetición de arquetipos psicológicos ‒el rey, el villano, la dama o el gracioso, entre otros‒. En las obras del Bardo están reflejadas todas las conductas y las pasiones humanas; está expuesta la incalculable variedad de las relaciones personales, familiares y sociales. Teniendo en cuenta esto, ¿qué relaciones hay, entonces, entre los personajes que aparecen en sus tragedias? ¿Están aislados o estrechamente conectados? ¿Están todas sus tragedias estructuradas de la misma manera?

   El diseñador y analista de datos Martin Grandjean ha examinado las once tragedias más famosas de Shakespeare en busca de estos patrones. Y como resultado de ese análisis ha elaborado una tabla donde se recogen las relaciones entre los personajes de cada una de esas obras. Cada personaje se representa como un círculo y cuanto más importante es más grande es el círculo. Los círculos se unen unos con otros dependiendo de las interacciones que hacen entre ellos en una misma escena.

   Así descubrimos que aunque Hamlet es la tragedia más larga, su estructura es menos densa y compleja que el Rey Lear, Tito Andronico, Otelo o Antonio y Cleopatra. El esquema de algunas obras revela además la existencia clara de los grupos enfrentados: los Montesco y los Capuletos en Romeo y Julieta, los troyanos y los griegos en Troilo y Crésida o los triunviros y los egipcios en Antonio y Cleopatra. Una visión, en definitiva, muy distinta de la obra de uno de los escritores más extraordinarios de la historia.

Relaciones en las tragedias de Shakespeare

Relaciones en las tragedias de Shakespeare

Comentarios

comentarios