Alliances: Un juego de luz es la novela póstuma de Stan Lee, el gran artífice de Marvel, co-creador de personajes tan emblemáticos como Spider-Man, Iron Man, Daredevil, los X-Men y un enorme etcétera. Esto, por sí mismo, ya es un buen motivo para echarle una ojeada a esta novela juvenil que causó furor en la feria literaria de Frankfurt antes de su estreno, un mes antes de la muerte del autor. Tal y como ocurriera hace tantos años en las páginas de los cómics, ahora convertidas en obras referenciales y reverenciadas, pero no tan importantes entonces, en Alliances nos encontramos una historia imaginativa y llena de acción:

La novela del creador de universos más grande de nuestros días. Una nueva generación de héroes está lista. ¿Y tú?

¿Qué es más real? ¿El mundo en el que nacemos o el que nos creamos? Una nueva generación de héroes está lista. Son jóvenes y rebeldes, poseen superpoderes extraordinarios y no tienen miedo de usarlos. ¿Su objetivo? Derrotar el mal que amenaza con destruir el planeta.

La premisa de Alliances: Un juego de luz tiene, pues, mucho que ver con lo que ya hizo famoso a Stan Lee en su día. Sorprende, eso sí, leerlo ahora en formato de novela. Esta es una historia juvenil enfocada al fan de Marvel, al que disfrute de las películas de The Avengers, pero también para el fan de la ciencia ficción más soft y aventurera. Podríamos decir que tiene bastantes puntos en común con historias como Ready Player One de Ernest Cline, pues está muy presente el tema de la vida digital, las capacidades tecnológicas del futuro y la dicotomía entre mundo real y mundo digital.

Desde el principio en que conocemos a Cameron, quien tendrá un rol predominante en la historia, nos damos cuenta que es un arquetipo del héroe que debe encontrarse a sí mismo. De hecho, en la historia comienza siendo un muchacho apocado, torpe y anodino, que busca la popularidad a través de YouTube. Más de un milenial y generación Z se sentirá identificado con esto. Tras recibir el impacto de un rayo, Cameron desarrolla habilidades que le permiten controlar el flujo de datos en Internet, usar smartphones y ordenadores a distancia y otro montón de habilidades que irá descubriendo a medida que conoce a Nia, una extraordinaria hacker criada por su padre en total aislamiento. Juntos se enfrentarán a una amenaza que viene desde muy lejos…

Como se ve, una historia aventurera, con toques de ciencia ficción más bien suave, con un romance, una amenaza, poderes que descubrir y una gran responsabilidad (que es la marca todo gran poder)… En definitiva, las cosas que hicieron grande el nombre de Stan Lee. Y claro, nadie negará que por lo principal que nos acercamos a esta lectura es precisamente por el nombre que la firma (junto a otra autora, no lo olvidemos, Kat Rosenfield), pero lo cierto es que ya desde las primeras páginas nos encontramos con una novela mucho mejor conformada y escrita de lo que una aproximación cínica podría dejar entrever. Alliances: Un juego de luz es una de estas narraciones en que nos adentramos sin darnos cuenta, pasando páginas y dejando pasar las horas de lectura, enganchados a su trama y a sus personajes.

Con una prosa llena de soltura, bastante más elegante y resolutiva de lo que me esperaba (en esto, supongo, se notará mucho la mano de Kat Rosenfield, no en vano periodista de Playboy, Entertainment Weekly y autora de las novelas Inland Amelia Anne is Dead and Gone). Me he encontrado también con algunos clichés más bien molestos que, desgraciadamente, se repiten demasiado a menudo en la literatura juvenil contemporánea (la chica encerrada y sin habilidades sociales pero increíblemente bella y, por supuesto, ignorante de su efecto en los hombres), el abuso de la trama que avanza por casualidades inconcebibles o el síndrome de Clark Kent (el personaje absolutamente gafado, nerd e invisible que, para contrarrestar tal dechado de infortunios, resultar ser el más poderoso de la galaxia)… En fin, una serie de estereotipos que parecen funcionar bien en las narraciones ligeras repletas de acción, pero que cansan a un lector que tengo algo más de bagaje.

Pese a estas carencias Alliances: Un juego de luz es bastante interesante. No se puede asegurar cuánto es obra de Stan Lee y cuánto de Kat Rosenfield, pero me inclino a pensar que el planteamiento más al estilo superhéroes es del bueno de Lee y todo lo que tiene que ver con la conexión entre esas ideas de la golden age de los tebeos y el público actual, las nuevas tecnologías y los problemas que estas conllevan, me parece más cercano a Rosenfield. En cualquier caso, un binomio que ha dado como respuesta una novela interesante, llena de acción, de buenas ideas, con tan solo algunos peros que redondearían lo que ya es una buena lectura para adolescentes y jóvenes. Muy en la línea de la ya citada Ready Player One, pero también de algunas producciones para la pequeña pantalla como Primer Bésame o Black Mirror. Una excusa perfecta para abstraerse de lecturas menos casuales y disfrutar de una narración old style que destila todo lo que Stan Lee sabía hacer muy bien. Eso sí, espero que con la muerte del autor no acabe la saga, ya que el mundo construido en Alliances: Un juego de luz da para más de una sola novela.

La edición de Duomo es fabulosa, con una tapa dura excelente, un libro ligero, una buena traducción y un precio asequible.

Stan Lee es conocido en el mundo entero por ser el hombre cuyos superhéroes han establecido Marvel como el imperio de la industria del entretenimiento. Sus co-creaciones incluyen Spider-Man™, los Vengadores™, los X-Men™, Los Cuatro Fantásticos™, Pantera Negra™, Hulk™, Thor™, Iron Man™, Daredevil™ y muchos más. Lee continuó trabajando como presidente emérito de Marvel Entertainment hasta su muerte en 2018. También fue presidente y director artístico de Stan Lee’s POW! Entertainment, fundada junto a su socio ejecutivo Gill Champion y con Arthur Lieberman.

Kat Rosenfield es periodista política y experta en cultura pop, finalista del Edgar Award con Amelia Anne is Dead and Gone (2012) y Inland (2014). Ex reportera de MTV News, sus trabajos han aparecido en medios de referencia como Wired, Vulture, Entertainment Weekly, Playboy, US Weekly y TV Guide.

Comentarios

comentarios