En un esfuerzo por promover la lectura entre los niños que tienen un difícil acceso a los libros, Antonio La Cava, un maestro de primaria jubilado, comenzó a viajar por algunos de los minúsculos pueblos de la región de Basilicata, al sur de Italia, con su pequeño vehículo llamado «Bibliomotocarro», que no es más que un camioncito que ha sido reconvertido en biblioteca móvil. Me ha parecido fascinante la imagen de La Cava anunciando su llegada con música de órgano y congregando a los niños en las plazas de los pueblos, como si fuera el camión de los helados, pero con libros en lugar de con helados.
El vehículo está decorado como una casita de cuento, con un techo de tejas rojas y una chimenea, para llamar la atención de los más pequeños. Tras la vitrina de cristal esta biblioteca móvil guarda unos 700 volúmenes para niños de edades comprendidas entre unos ocho y doce años. Según La Cava, que ayuda a los niños a elegir los libros que más les llamen la atención y se los deja en préstamo hasta su vuelta, «se crea una atmósfera mágica». Además, ha ideado un Libro blanco, en el que los niños pueden escribir todo lo que quieran, historias que se van componiendo a medida que se completa el trayecto.
Una interesante propuesta para promocionar la lectura en áreas con poca actividad cultural que me ha recordado inevitablemente al «Biblioburro» que Luis Humberto puso en marcha hace algún tiempo en algunas de las zonas más alejadas y deprimidas de la Colombia rural.
Sin duda aún ocurren buenas historias en este mundo nuestro tan poco cuidado
Por supuesto, lo que pasa es que lo malo suena más.
Me parece una iniciativa deliciosa de este buen señor italiano. Recuerda también, en cierto modo, a los juglares que contaban historias en las plazas mayores de los pueblos, pero con libros y a motor. ¡Excelente!
Muy interesante como Antonio da Cava no se rindió a encerrarse en casa después de jubilado, sino, más bien con su experiencia y amor por los que vienen detrás, los niños, acercó una biblioteca para su uso, abriendo la oportunidad para leer cerca de casa; muy intuitivo al imitar su biblioteca rodante como si fuera el camioncito de los helados, en hora buena saludos…